Artículo de Pepe Monteserín en su sección "La Mar de Oviedo", en el diario La Nueva España (Oviedo).
Soy escritor con ánimo de lucro. Escribo porque me apasiona y escribiría aunque no supiera nada y nada tuviera que contar; escribo por necesidad ética, estética, céltica y profiláctica, y porque no tengo más remedio; de no hacerlo me saldría el tóner por las orejas; escribo porque me gusta ponerme en el lugar de otro, poner al otro en su lugar y a mí mismo fuera de lugar, salirme de quicio; escribo por dar de lado a la realidad y para evitar que mis sueños se hagan realidad, quiero preservarlos; escribo sin razón muchas veces, por emoción, o sea, porque me da la gana. Pero no me avergüenza confesar mi afán de lucro, más allá de mi voluntad de sobrevivir. Rechazo los quebrantos, por muy ventajosos que sean en el aprendizaje vital; prefiero experimentar el lucro. Y merecerlo, claro; he ahí el quid del sistema, el de la bolsa y el de la vida.
Fotografía : Monteserín mendiga tocando el kazoo en el Cañón del Colorado (Arizona) en 1983.